La compañía acordó pagar 2.2 millones de dólares para resolver una demanda presentada por la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos.
Como si no fuera suficiente con que los teléfonos y los navegadores estén constantemente capturando información acerca de los usuarios, ahora también habrá que prestar atención a los televisores.
Vizio acordó pagar 2.2 millones de dólares para resolver una demanda presentada por la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos. La compañía instaló software en 11 millones de sus Smart TVs para recopilar datos de visualización sin informar a los clientes ni solicitar su consentimiento.
Además, también registró la dirección IP de cada hogar, los puntos de acceso cercanos y el código postal, y compartió esa información con otras empresas para orientar anuncios hacia sus usuarios.
De ahora en más, Vizio tendrá que revelar las prácticas de recolección de datos en las que se involucra y obtener el permiso de los propietarios de TV. También tendrá que eliminar los datos que recogió.
En un comunicado, Vizio dijo que su programa de recolección de datos “nunca emparejó los datos de visualización con información personalmente identificable como nombre o información de contacto” y aclaró que utilizó esa información ” para crear informes de resumen que miden audiencias o comportamientos de visualización. ”
Afortunadamente, la recolección de datos se limitó a los apartados antes citados, pero tranquilamente podría haber sido mucho más intrusiva y los clientes tal vez nunca lo habrían sabido. Incluso, esa información podría haber sido solicitada por el gobierno y las agencias de espionaje, o robada por hackers.
